Europa Press/CádizEl sector pesquero del cerco del Golfo de Cádiz tiene previsto terminar hoy la parada biológica del sector que empezó el 15 de noviembre, una semana después de que la Junta de Andalucía, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) y los pescadores y armadores andaluces suscribieron el acuerdo sobre plan de pesca para las pesquerías del Golfo de Cádiz.
Dicho acuerdo, que tiene una vigencia de dos años, contemplaba para este año una parada biológica en el sector entre el 15 de noviembre y el 15 de febrero y se contemplaba además que a los tripulantes se les abonará lo correspondiente a 90 días naturales, a razón de 36 euros por día, más el aumento del Índice de Precios de Consumo (IPC).
Esto supone, según indicó entonces el consejero de Agricultura y Pesca, Isaías Pérez Saldaña, en torno a 2,6 millones de euros, unos 1.080 euros al mes por tripulante.
Además, se abonará a los armadores lo equivalente a 60 días naturales, una reivindicación del sector, frente a la primera opción de pagar los días laborables de dos meses, que hubieran supuesto 45 días naturales. Esos 60 días naturales supone una ayuda de unos 10.000 euros por barco, de forma que el montante total para los armadores asciende al millón de euros.
Así, en total el sector recibirá unos 3,6 millones de euros en conceptos de ayudas tanto a armadores como a tripulantes.
En cuanto al próximo año, las partes analizarán los resultados de los estudios del Instituto Español Oceanográfico para determinar la conveniencia o no de una nueva parada biológica, su duración y momento más adecuado.
El plan también establece medidas de reducción definitiva del esfuerzo pesquero, respecto a la modalidad de cerco en el Golfo de Cádiz, concretando dicha reducción en un seis por ciento para los dos años de vigencia del mismo.
Para ello, indicó que se promoverán las acciones necesarias para que los armadores puedan acceder a un Fondo de Pesca por desguace de aquellas embarcaciones que estén obsoletas. Dichas medidas de desguace tendrán un carácter voluntario en aras de "conseguir que haya embarcaciones que faenen en consonancia con el caladero y en condiciones de rentabilidad".
El sector del cerco del Golfo de Cádiz acoge a una flota de 101 barcos y unos 800 tripulantes y se ubica en los puertos de Barbate y Sanlúcar de Barrameda, en la provincia de Cádiz, y Punta Umbría, Lepe, Isla Cristina y Ayamonte, en la de Huelva.
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Dicho acuerdo, que tiene una vigencia de dos años, contemplaba para este año una parada biológica en el sector entre el 15 de noviembre y el 15 de febrero y se contemplaba además que a los tripulantes se les abonará lo correspondiente a 90 días naturales, a razón de 36 euros por día, más el aumento del Índice de Precios de Consumo (IPC).
Esto supone, según indicó entonces el consejero de Agricultura y Pesca, Isaías Pérez Saldaña, en torno a 2,6 millones de euros, unos 1.080 euros al mes por tripulante.
Además, se abonará a los armadores lo equivalente a 60 días naturales, una reivindicación del sector, frente a la primera opción de pagar los días laborables de dos meses, que hubieran supuesto 45 días naturales. Esos 60 días naturales supone una ayuda de unos 10.000 euros por barco, de forma que el montante total para los armadores asciende al millón de euros.
Así, en total el sector recibirá unos 3,6 millones de euros en conceptos de ayudas tanto a armadores como a tripulantes.
En cuanto al próximo año, las partes analizarán los resultados de los estudios del Instituto Español Oceanográfico para determinar la conveniencia o no de una nueva parada biológica, su duración y momento más adecuado.
El plan también establece medidas de reducción definitiva del esfuerzo pesquero, respecto a la modalidad de cerco en el Golfo de Cádiz, concretando dicha reducción en un seis por ciento para los dos años de vigencia del mismo.
Para ello, indicó que se promoverán las acciones necesarias para que los armadores puedan acceder a un Fondo de Pesca por desguace de aquellas embarcaciones que estén obsoletas. Dichas medidas de desguace tendrán un carácter voluntario en aras de "conseguir que haya embarcaciones que faenen en consonancia con el caladero y en condiciones de rentabilidad".
El sector del cerco del Golfo de Cádiz acoge a una flota de 101 barcos y unos 800 tripulantes y se ubica en los puertos de Barbate y Sanlúcar de Barrameda, en la provincia de Cádiz, y Punta Umbría, Lepe, Isla Cristina y Ayamonte, en la de Huelva.
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